Saturday, June 26, 2010

APRENDE A ELEGIR - Por Marcos Witt.

Les quiero contar una vivencia, algo que fue muy difícil, y el único deseo al compartírselo a ustedes es que cuando vivimos esa clase de cosas, es porque Dios tiene un plan para desarrollarlo en nosotros. Lo que tuve que aprender fue algo muy difícil que tiene que ver con el noviazgo y el matrimonio.

Tenía 21 años, estaba en el ministerio, pues empecé a los 19 años de edad. Era muy entusiasta, lleno de energía, con ganas de hacer las cosas. A los 17 años, empecé mi primera cruzada. Traje una película que se llama “La cruz y el puñal”, se convirtieron muchas personas. Estaba como todos a los 21 años, buscando quién es la persona que Dios tenía para mi vida, cómo era, dónde estaba. En ese entonces, dirigía un ministerio de jóvenes llamado Proyecto Juventud, tenía un ministerio de alcance juvenil, quería tener una cafetería cristiana donde servir donas y café. Venían muchachos de todos lados, entre ellos, muchos grupos de personas llamadas “cholos”, como las maras o pandillas juveniles. Yo me vestía de la misma forma que ellos, y alcancé a varios. En una oportunidad, frente a nuestra cafetería se pusieron dos bandos. Uno de ellos se refugió en nuestro café. En la acera del frente tenían botellas, piedras y estaban bastante enojados, molestos y mi grupo de jóvenes estaba en la entrada de la puerta. Nos pusimos todos a orar y Dios nos usó para traer conciliación. Una vez, estaba por la calle y fui abordado por uno de estos grupos, querían golpearme, pero uno de ellos me reconoció como la persona que regalaba donas y me dejaron ir.

He sido una persona muy inquieta y eso es un consejo que quiero darte. Si alguien trata de aplacarte, sólo diles: “Con permiso, tengo que vivir inquieto”. Dios ha puesto la inquietud en medio de profetas. Los que viven quietos, nunca cambian nada. No cambian su té de manzanilla, siempre lo ponen igual, como siempre, se comen la misma galletita de siempre, cierran las cortinas, se sientan en el mismo lugar de siempre; ese no eres tú. Tú eres un “cambia mundos”, y como tal, tienes que vivir inquieto, estar insatisfecho con lo que tienes ahora. No puedes estar satisfecho con tu forma de vida, con tu peinado. Cambia cada dos semanas, mientras lo puedas hacer, porque te llegarán los días en que no puedas hacer nada por tu cabello. Eres un “cambia mundos”, vive inquieto.

En mi equipo de trabajo, estaba una joven extraordinaria, fuera de serie, una conocedora de la Palabra, una mujer de oración, trabajadora, entregada al ministerio y muy guapa, teníamos una buena amistad. En una ocasión, fuimos a un evento donde había un profeta de Dios, había muchas personas y quiero decirte de preámbulo que creo en el poder de la profecía, hay algunas que se están cumpliendo al día de hoy, y otras, no se han cumplido aún. Creo en el don profético, y que Dios usa a profetas. En esa ocasión, estaba yo sentado escuchando cómo Dios usaba a esta persona y me maravillé. Un don profético que fluye es maravilloso. Esa tarde, una serie de circunstancias se dieron y después de la comida, estábamos sentados mi amiga y yo, y frente a nosotros estaba sentado el invitado. Tuvimos una conversación amena y no sé lo que empañó su visión al vernos juntos, pero esa tarde me llamó al frente para orar por mí, y me preguntó dónde estaba la joven con la que estaba comiendo. Entonces la llamó. Yo empecé a vivir lo que serían diez meses de confusión. Los papás de ella estaban en el público. Y empezó este hombre de Dios con este versículo: “El que halla esposa, encuentra la benevolencia de Dios”. Después de decir esto, era ya cuestión de elegir la fecha, pues él ya lo había profetizado. Creo en el don profético, pero sé que a veces los profetas mezclamos nuestra humanidad y nuestro conocimiento. Si usted tiene un conocimiento humano de algo, no profetice. La profecía es una confirmación de algo que Dios me ha dicho a mí.

Tengo que decirte que yo sí me sentía atraído a ella, me encantaba cómo se vestía, se peinaba, pero Dios no me había hablado nada acerca de casarme con ella. Los papás estaban en el público, encantados de la vida. Transcribieron la profecía, porque alguien tuvo a bien grabarla, y me pasaron una copia. Mi papá, que era uno de mis consejeros y con quien yo tenía mucha confianza, la leyó y me dijo: “El no es el que se tiene que casar con ella, sino tú, necesitas estar seguro que Dios está dirigiendo esto, y no porque te sientes comprometido por la profecía. ¿Por qué te vas a casar con ella?”. Le respondí que tenía un espíritu de intercesión, conocía la Biblia, etc. Pero todas esas eran razones equivocadas para casarme. Pensaba que me iba a servir para el ministerio, que era organizada, sabía mover gente, pero todo eso no debe ser la razón para casarte. Entonces, me preguntó si estaba enamorado de ella, si aguantaba con la posibilidad de vivir sin ella, sin estar a su lado. Mi padre me dijo que orara. Esta conversación la tuve con él después de meses de consternación, porque yo quería amarla, pero no había esa chispa adentro.

Después de nueve meses de una frustración interior muy fuerte, finalmente tomé la decisión que no estaba enamorado de ella, y que me estaba casando por todas las razones equivocadas. Teníamos una fecha, ella estaba viendo vestidos, yo no. Yo estaba mal, y después de un rato, tomé la decisión de pasar días, los que fueran necesarios orando y ayunando, separado de ella. Resultaron ser diez días. Al final de este tiempo, yo tenía una Palabra clara. A través de una profecía, Dios me habló. Él usó esa experiencia para que me cuide mucho cuando uso la voz de Dios para hablarle a la gente. Si usted es receptor de una palabra profética, asegúrese de una cosa en especial: que le haya hablado algo a su espíritu. Una palabra de profecía tiene que venir a ser confirmación de algo que Dios te ha dicho. Si yo hubiera estado enamorado de ella, si hubiera estado visionando mi vida con ella, eso hubiera sido una confirmación de lo que Dios estaba haciendo. Después de ese ayuno, me levanté y me fui a la casa de mi prometida, me senté con ella y su familia; les di la noticia. No tengo planes de casarme con su hija. Quizás haya alguien que haya vivido eso, es muy difícil. La mamá empezó a llorar, luego mi novia, y el papá estaba muy callado, molesto. Ahí empezó una etapa que duró tres años de dolor, confusión, reclamo. Tuve que vivir esa experiencia por alguna razón, todavía no entiendo bien porqué. Me enseñó muchas cosas, entre ellas, a no tomar decisiones en base a motivaciones incorrectas. Si algo necesitas anotar, es eso. Tus motivaciones deben ser las correctas en todas las relaciones.

Escuché a los predicadores hacerles preguntas sobre porqué están en las relaciones que están. ¿Porque tiene una cara bonita? Eso no es lo que te sostendrá en el día difícil. Recuerdo la historia del joven recién salido de la escuela bíblica, y estaba entre dos jovencitas. Una preciosa de ojos verdes, pero no daba una, no sabía la Biblia, no sabía organizar nada, lo único que tenía era una sonrisa y unos pechos impresionantes. Del otro lado, estaba Gloria, una muchachita buena gente, con buena personalidad, carácter, conocía la Palabra de Dios, sabía tocar el piano y tenía una voz angelical, pero al momento de mirarla, ella no era muy linda. En ese momento, el predicador decidió ser práctico, y se casó con Gloria, pues ella lo ayudaría en el ministerio. Al día siguiente, la ve en la cama, con el pelo parado, el maquillaje se le había ido, las pestañas estaban colgando, y lo único que se le ocurrió decir es “Canta, Gloria, canta”. ¿Por qué te estás enamorando de esa chica? ¿Cuáles son tus motivaciones al necesitar una novia? Muchos chicos la necesitan para que todos los demás digan: “Qué tremendo ese hermano”. Esa es la motivación incorrecta para una relación. ¿Cómo vivimos nosotros el día de hoy? ¿Eres uno de aquellos que cree que tiene que picar de flor en flor? ¿Eres uno de los que entra al súper, y mayuga a todas las frutas que están ahí? Se te olvida que es de alguien, hija de alguien. ¿Cómo la estás tratando? Yo me estaba casando por las razones equivocadas, confundido por una profecía equivocada. Han pasado 24 años de esa profecía y te puedo decir mirando para atrás, que le doy tantas gracias a Dios que tuve la fuerza de voluntad suficiente para sentarme en la sala de mis posibles suegros a plantearles la situación.

Ahora tengo 21 años casado con una gran mujer que se llama Miriam. Nos conocimos por casualidad. Fui a su iglesia y ella era la directora de alabanza. Estando ahí, ella se quitó los zapatos para poder danzar. Cuando vi esa acción, dije: “Esta es una mujer que no le importa lo que piensa la gente con tal de expresarse a Dios”. Ella está más interesada en Dios que en la opinión pública. Una mujer que está muy preocupada de la opinión pública, puede ser problemática. Si tu novio está más preocupado de lo que otros piensan de él, en lugar de hacer la voluntad de Dios para su vida, estás en problemas. Porque a la hora de que tenga que tomar una decisión para su hogar, estará más preocupado por otras cosas. Tú necesitas un hombre que tome liderazgo, que sea sacerdote en su casa. La Biblia dice: Mi casa y yo serviremos a Jehová, y eso lo dijo de un hombre. No estoy minimizando el papel de la mujer, porque la mujer debe decir: “Amén, yo estoy contigo”.

Me encontré con una mujer tan segura de sí misma y de su relación con Dios, que no lo piensa dos veces para decirme lo que está pensando. Y Dios sabe que yo necesitaba una mujer de esas. Los que conocen a mi esposa saben que es una mujer calladita, pero cuando habla… “Ay, Dios mío”. Muchachos, si se quiere casar con una niña que siempre está “si mi amor, que lindo, mi amor, lo que usted diga”. Al rato, ese muchacho te va a meter en problemas, porque no tuviste la libertad de decirle “no, mi amor”. Yo tengo una esposa que me sabe decir: “No, mi amor”. Me respeta mucho, pero sabe decirme lo que está pensando. ¿Le puedes abrir tu corazón a tu novio o novia? Si tienes un novio que cree que él es el único que piensa, bótalo ya.

No hay una sola mujer que quiera ser vista como objeto. Todas son mujeres de Dios, con dones, son “cambia mundos”, saben hablar, sentir, tienen visiones, sueños, tienen palabra profética, tienen el fuego del Espíritu Santo y van a cambiar su mundo. Sentado ahí a lado tuyo está una chica que será la mamá de uno de los próximos pastores de este país. Posiblemente, está la futura mamá de un presidente de este país. Trátenla con respeto, con clase, con altura. Basta de esos muchachos que sólo buscan una figura que tocar. Busca a alguien que te sepa decir lo que está pensando, con ternura.

Lo segundo, búscate a una chica que no se burle de tus sueños y visiones. Los hombres somos soñadores. Dios lo hizo conquistador por naturaleza. Te puso adentro el espíritu de conquistador. Nuestro deseo en la vida es conquistar, tomar tierra, terreno. Te hizo agresivo por naturaleza, pero la agresión que puso dentro de ti fue para proteger a tu familia y conquistar terreno, pero la utilizamos para una cantidad de otras cosas. El te hizo así para proteger a tu familia. Por ejemplo, cuando Adán tuvo que haber sido más agresivo que nunca, estaba dormido cuando entró la serpiente. Dios te hizo agresivo, conquistador, soñador.

Cuando tenía 18 años, estábamos en una fila para entrar en un concierto con una hermanita bien parecida. Yo no tenía mucho dinero, pero la saqué, la invité a comer y me quedé sin presupuesto ese mes. Estábamos ahí cuando me salió algo de aquí adentro, no sé que fue, tal vez era parte de la impulsividad de joven. Le dije: “Sabes que, yo creo que algún día va haber gente que haga fila para mis conciertos”. ¿Saben cómo reaccionó ella? Se burló, se rió. Cuando lo hizo, sentí un dolor en mi corazón muy profundo y tomé una decisión en ese instante. Pensé: “Este concierto lo vas a gozar, pero será el último al que yo te invite”. Nunca más salí con ella, porque una mujer que se burla de tus sueños, es peligrosa.

He tenido muchos sueños que son “burlables”, pero mi esposa nunca se ha burlado. Muchachos, ojalá tu amiga especial, tu novia, tu comprometida sea una mujer que no se burle de tus sueños. Muchacha, búscate alguien que sueñe, porque si no lo hace, estás con un poste.

Años después, estaba yo en Chile en el estadio nacional, que le caben como 75 mil personas. Entró el jefe de los edecanes casi llorando y me dijo: “Le tengo que compartir algo; la fila de gente era tan grande que salí a ver a dónde quedaba el final de la fila, subí a mi automóvil a ver si podía encontrar el final, manejé cuatro cuadras y media (medio kilómetro). ¡Qué privilegio!”. Y cuando me lo estaba diciendo, me acordé de la hermanita aquella que se burló.

Si permaneces enamorado de Dios y Él es la brújula de tu vida, El va a guiar tus pasos. No olvido el día que conocí a Miriam. Mi abuela siempre me había dicho: “Todos tenemos un discernidor, y en el momento que conozcas a la indicada, lo vas a saber”. La noche que la conocí, hablamos hasta las tres de la mañana, sentí que la había conocido de toda la vida. Esa noche supe que ella sería mi esposa. Al otro día, le hablé a mi abuela y le dije: “Tenía razón, la conocí”. Veintiún años después, Miriam y yo tenemos una amistad profunda.

Muchos de ustedes que tienen 16 años, que llegan al momento de su pico sexual, que tu testosterona está al máximo, te voy a decir algo: La relación duradera con tu compañera de vida, es algo que supera el sexo. La amistad que gozo con ella, supera eso, es comunión, es dar la vida por ella. Llega el momento en que puedes decir: “Daría mi vida por ella”, porque hay un compromiso tan profundo que supera lo sexual. A una muchacha se le hace fácil creer lo que estoy diciendo ahora, porque las mujeres llegan a su cima sexual a los 39 años. Hay cosas que van a sostener tu amistad y tu matrimonio que son mucho más poderosas que el sexo.

Mi último consejo es que entiendas que somos tridimensionales: alma, cuerpo y espíritu. El cuerpo es lo más temporal de nuestra existencia; lo eterno es nuestro espíritu. La relación con tu amigo, amiga o novio necesita tener una comunión en el espíritu. Por eso, la comunión alrededor de la Palabra de Dios, del Reino es excelente para empezar una relación. Esa primera vez que hablamos era sobre la Palabra. Estábamos en temas que tienen que ver con la Palabra de Dios, nuestra conexión fue primero espiritual. Que la convivencia sea alrededor del Reino; si logras eso, estás empezando una buena base para el matrimonio. Después de ver que tienes una comunión espiritual, puedes entrar al área emocional o sentimental. Ahí vas a empezar a sentir cosquilleos en el estómago, lo extrañas tanto, sientes cosas, te emocionas, ese es el segundo plano. Pero empieza primero la convivencia espiritual. El tercer plano es una convivencia física, esa debe ser la última convivencia, la expresión máxima de lo que ha sido una comunión espiritual y emocional, y eso debe comenzar el día de tu boda. Que lindo poderle decir a tu esposa: “Eres la primera mujer con la que yo he estado sexualmente”.

En la sociedad que vivimos, desafortunadamente, empiezan al revés. A ver si los labios me son compatibles, a ver si su cuerpo se amolda al mío, a ver si puedo sentir su calor, sentir su olor. Muchachos, les garantizo, no les sugiero que una relación que empieza físicamente, nunca o muy pocas veces tiene posibilidades de tener compatibilidad espiritual. Somos espíritu, tenemos alma y vivimos en este cuerpo. Pero si compatibilizamos en lo espiritual, vamos a ser compatibles en las otras áreas.

Empezamos con el espíritu, luego aspiramos a una relación sentimental para poder llegar a la física.

Más sobre la amistad y el noviazgo- Por Luis Palau


En el instituto bíblico se acercaba el tiempo de las vacaciones de invierno, y por un lado estaba ansioso de que llegaran. Visitaría a amigos, pero sobre todo tendría un descanso de los estudios. No obstante, en lo profundo de mi corazón no quería esas vacaciones. Cada vez estaba más interesado en Patricia, y cuando me enteré de que ella haría un viaje durante esos días, me preocupé pensando que pudiera llamar a algún viejo novio y volviera a verlo.
De manera que le dije a Patricia lo que sentía con respecto a ella. No fue un momento dramático ni demasiado romántico. Fue simplemente mi estilo directo y sin rodeos. Le dije que deseaba que supiera lo especial que ella era para mí, que me importaba mucho, y que esperaba que pudiéramos pasar más tiempo juntos luego de las vacaciones de modo de conocernos más y mejor.

Realmente la extrañé muchísimo. Luego del receso volvimos a los estudios, aunque debo admitir que mis calificaciones no fueron tan buenas. Patricia tuvo parte de la culpa ya que pasaba con ella tanto tiempo como me era posible.

Dos palabras caracterizaron nuestra relación durante ese período. Una de las palabras es CONOCIMIENTO. Al tiempo que Patricia y yo conversábamos y pasábamos tiempo juntos, me convertí en un experto en ella. Comencé a descubrir no sólo lo que ella pensaba, sino además por qué lo pensaba. Es verdad que
sólo se puede amar a alguien hasta el punto en que uno conoce a ese alguien.

El amor a primera vista puede sonar romántico, pero una verdadera relación de amor rara vez está basada en las primeras impresiones. Debemos tener cuidado de no desarrollar una imagen idealizada de la otra persona basándonos en esas impresiones, ya que tarde o temprano nos decepcionaremos. Es vital ser honesto y abierto desde el principio. Tenemos que crecer en amor al tiempo que profundizamos nuestro entendimiento y apreciación de la otra persona.

La otra palabra que quiero compartir ... ... es CONSAGRACION. La personalidad de Patricia, su inteligencia y su aspecto atractivo me llamaron la atención cuando la vi por primera vez, sin ninguna duda. Pero a medida que nos fuimos conociendo más el uno al otro,
descubrí su amor por el Señor Jesús, y eso fue decisivo. Patricia era una joven que había consagrado su vida a Dios, y eso se transparentaba en todo momento.

Así fue que, para mi sorpresa, un día me levanté con la certeza de que estaba enamorado de Patricia y deseaba pasar el resto de mi vida sirviendo al Señor con ella. Hablé con sus padres, y confieso que a pesar de lo mucho que los quiero esa primera vez sentí un gran dolor de estómago por los nervios que tenía. Ellos se alegraron; nos aconsejaron, y no pasó mucho tiempo antes de que nos comprometiéramos.

Realmente no puedo decir que el momento en que le propuse casamiento a Patricia fue romántico. Yo traté de que sí lo fuera, pero en lugar de preguntarle si se quería casar conmigo, le pregunté si quería volver a la Argentina conmigo. Ella comprendió lo que yo quería decir y todo lo que esa pregunta implicaba. Cuando me dijo que sí, que regresaría conmigo a la Argentina, yo también comprendí lo que su respuesta quería decir.

Nos casamos unos meses después, y cada día le doy gracias al Señor por el regalo más grande que me ha dado luego de la salvación: mi amada esposa.

Como cristianos consagrados al Señor, no debemos casarnos con alguien que simplemente sea cristiano (1 Corintios 7:39), sino con un cristiano que crezca en el Señor Jesús. Alguien cuya vida esté marcada por su consagración a Dios, por la verdadera espiritualidad.

Hágase estas preguntas: "La persona que yo amo, ¿en verdad me desafía, alienta e inspira a vivir cada día más cerca del Señor? ¿O acaso me doy cuenta de que él/ella obstaculiza mi crecimiento espiritual?"

Ante Dios hoy mismo tome la decisión de que se pondrá de novio y se casará ... ... con alguien con quien pueda buscar el reino de Dios toda la vida. Nada podría ser más emocionante.

LA AMISTAD- Por Danilo Montero

Se dice que un amigo es un hermano por decisión. No escogemos a nuestros hermanos en casa, ni ellos nos escogieron a nosotros. A muchos de nosotros no nos hizo mucha gracia la idea de tener “hermanos”. “A los hermanos hay que quererlos” nos decía mamá, “hay que ser hermanables” nos repitió cuando lloramos a gritos por no querer prestar un carrito.
Bueno siendo franco fueron muchas las veces en que siendo niño le pregunté a Dios: ¿para qué sirven los hermanos mayores?…aparte de hacerte la vida de cuadritos…

Y aunque hay un vínculo sin igual con nuestros hermanos de carne, con el paso de los años nos damos cuenta que hay personas con las que “escogemos” compartir la vida por una cuestión de “empatía” o gustos similares: nuestros amigos. Estos son “hermanos” por decisión nuestra.

El concepto de amistad conlleva implícita la idea de afecto desinteresado y pureza, así como la idea de merced o favor. Déjame explicarlo un poco.
De quién somos amigos?

De aquellos a los cuáles les dimos acceso a compartir nuestra vida por razón de gustos comunes, afinidad de carácter o visiones afines.

Hay personas que se acercan a uno queriendo ser nuestros amigos. Pero no entran dentro de esa categoría hasta que nosotros acordamos que así sea y nos abrimos a esa relación.

La amistad es uno de los mejores regalos dados por Dios al hombre.

Dios nos ha ofrecido su amistad desde el principio.

Su voz llamó a Adán que se escondía detrás de los arbustos luego de pecar para restaurarlo. Su corazón buscaba reanudar la comunión perdida y lo ha hecho desde ese momento.

Cada vez que Dios ha encontrado un corazón dispuesto, lo ha promovido a ese nivel de amistad profunda con El. Tal es el caso de Enoc, cuyo caminar con Dios lo hizo merecedor de ser llevado por él. Génesis 5:24 Asimismo lo atestiguan las vidas de Noé, Elías y tantos otros héroes de la fe.

A Dios le gusta la amistad.

En sus tratos con Abraham, el Señor preparó al patriarca para establecer una amistad profunda entre ambos.

Por eso lo llevó a Moriáh en donde Abraham se dispuso a entregar a Isaac y al hacerlo, encontró la clave para lograr una amistad íntima con Dios:

“Porque ya conozco que temes a Dios, por cuanto no me rehusaste tu hijo, tu único” Génesis 22:12

Su confianza y disposición a toda prueba lo hicieron merecer el titulo de ‘Amigo de Dios”
Santiago. 2:23

Lo que mas me sorprende de Dios en este sentido es que al procurar nuestro compañerismo establece las bases para que tal cosa pueda suceder.

1. Crea el universo y establece su orden en él.

Dios es Padre primero y como tal, primero establece respeto En su creación. Manifiesta su poder, gloria y majestad. Entonces nos crea para que podamos reconocer quien el El.

No puede haber amistad sin establecer respeto y siendo que estamos hablando de amistad con Dios, debe estar bien claro que antes de poder disfrutarla tenemos que aceptar Su lugar de honra.

2. Dios nos crea y nos invita a conocerle, a ser sus amigos. Luego de Padre, Dios es amigo.

ESO ES INCREIBLE!!!

Que probabilidades tenemos como humanos de poder ser amigos de Dios? Ninguna, a menos que El ASI LO QUIERA!!!

Y esas son las buenas noticias del Evangelio:

Jesús vino para hacer de pecadores sus amigos. Su sacrificio buscó asegurar que eso fuera posible.

Jesús no estaba buscando “empleados” ni “siervos”. Tampoco vino a formar un “concilio” ni una junta. VINO A BUSCAR AMIGOS!

Jesús delata que su amor salvador es en esencia el amor de un amigo:

“Nadie tiene mayor amor que éste: que uno dé su vida por sus amigos” Juan 15:13 (Biblia de las Américas)

Juntamente con esta afirmación clarísima de lo que el Evangelio es, les comunica a sus discípulos:

“Ya no os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque os he dado a conocer todo lo que he oído de mi Padre” Juan 15:15 (Biblia de las Américas)

Jesús no solo viene a quitar de en medio el pecado que nos bloqueaba el acceso al corazón de Dios, sino que también nos revela la “voluntad” del Padre para que al hacerla podamos disfrutar de esa intimidad que anhelamos con El.

“Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando” Juan 15:14

Esto va en línea con lo que mencionan los salmos como una condición indispensable para la amistad con Dios:

”La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, Y a ellos hará conocer su pacto”

Salmo 25:14

El mismo Dios que nos ama “sin condiciones” para poder salvarnos, requiere una condición para ser nuestro intimo amigo: guardar sus mandamientos.

Jesús es la personificación perfecta de lo que amistad es.

1. Una verdadera amistad es fruto de una decisión de amor, mas que de sentimientos. En otras palabras, debe hacer “intencionalidad” para poder iniciarla y hacerla crecer.

2. La amistad verdadera se establece y crece en medio del respeto. Toda amistad positiva debe forjarse por medio del reconocimiento de los límites de cada uno y de la búsqueda de la honra mutual, la transparencia y la sinceridad.
3. La amistad se ejercita en la capacidad de entrega desinteresada.
4. Un verdadero amigo permanece al lado no importa lo que pase.

“En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia”

Proverbios 17:17

Eso explica por qué Jesús regresa a la orilla de la playa después de resucitar: a buscar a sus amigos que habían perdido la fe.

CELEBRO LA AMISTAD
Quiero celebrar a los amigos de mi vida. Fácil es que suene un poco idealista porque el mundo se ha vuelto un lugar lleno de desconfianza, traiciones y desilusiones. Quien puede creer que hay amigos de verdad. Crecí escuchando a mi abuela decirlo. Papa lo repitió muchas veces y mama lo dijo y lo vivió: nunca confíes en la gente tanto, porque luego te va a doler. Un consejo materno que vi cumplirse como si fuese un presagio muchas veces. Lo llore pero rehuse aceptar tal cosa.

Pero encontrar las buenas noticias del Evangelio trajo consigo la esperanza de conocer el sabor de una amistad verdadera.
La amistad de Jesús es poderosa, aún delante del beso traidor, el maestro puede llamar “amigo” a quien lo vendía. Su entrega tiene el poder de borrar la desilusión que nos dejan los rastros traicioneros del hombre.

El evangelio me ha enseñado a creer en la amistad.

Doy gracias por Babelit, que me hablo del mejor amigo en el universo cuando yo tenía nueve años.

Por Raúl y Dinorah, mis pastores que como padres nos guiaron con mano firme en medio de las tormentas de nuestra adolescencia

Ursula es una amiga que me buscó cuando traté de huir del Señor a los 18. Me marcó con sus palabras “yo te creo, creo en lo que Dios ha puesto en ti” y aún lo sigue diciendo mas de 20 años después.

Doy gracias por la amistad de Juan Carlos, mi compañero de batalla, quien junto a su familia ha n estado dispuestos a servirme al grado de sufrir por ello si es necesario.
Doy gracias por Marcos Witt que con su amistad nos ha retado una y otra vez para hacer la voluntad de Dios en nuestras vidas. Nunca voy a olvidar como sembró mil dólares para que pudiéramos comenzar los congresos que impactaron tantas vidas hace mas de diez años.
Celebro la amistad de Sammy Hinn, porque con ella me ha transmitido una pasión tremenda por Dios y por la vida. Su unción de “entrenador” me ha hecho creer una y otra vez que lo puedo lograr.

Celebro correr esta carrera al lado de tantos que no puedo mencionar, pero que al ofrecerme su amistad me han retado a aprender a ser un verdadero amigo también.

DECIR ¡NO! A LA PRESION SEXUAL / por Josh McDowell


¿Qué razones dar a los adolescentes para que se abstengan de las relaciones premaritales? Hay una razón básica, Dios nos lo prohibe. No obstante, Dios nos ha dado numerosas razones para obedecer su mandamiento y es vitalmente importante conocerlas. El autor nos ofrece ocho buenas razones para que sus adolescentes esperen.

Hay una razón básica para abstenerse de la relación premarital: porque Dios lo dice. Si Él dice que el sexo prematrimonial está prohibido (y lo ha dicho) entonces es causa suficiente para refrenarse de tal conducta. No obstante, Dios nos ha dado numerosas razones para obedecer su mandamiento y es vitalmente importante conocerlas porque es conocer el por qué.
¿POR QUÉ ESPERAR?
Tenemos ocho buenas razones para que tu adolescente espere, cuatro son beneficios y las otras cuatro consecuencias.
BENEFICIOS
1 El esperar favorece una relación personal, más que física.
Todos deseamos una relación de amor íntimo y el sexo es la expresión física de esa relación. Pero es sólo un reflejo de intimidad, no la causa. Cuando el sexo está primero que una relación personal, no deja que el verdadero amor se desarrolle.
2 El esperar desarrolla el carácter.
El sexo está diseñado para experimentarse entre dos personas casadas, construido sobre autocontrol, disciplina, sensibilidad, paciencia, compromiso, confianza y fidelidad. Cuando está gobernado por esas cualidades capacita a la pareja para gozar de grandes profundidades en intimidad y unidad. Cuando esto se halla en el carácter, son el fundamento para la continuidad y la satisfacción de una relación y del matrimonio.
3 El esperar asegura una relación confiable.
La confianza es fundamental para el matrimonio. Cuando un esposo o una esposa sabe que el otro ha esperado, se fortalece el factor de confianza. Si un hombre y una mujer pueden esperar hasta el casamiento para consumar el sexo, hay una confianza agregada de que él o ella se mantendrá fiel después del matrimonio.
4 El esperar construye una buena autoestima.
El esperar desarrolla el carácter y, mientras el adolescente ve que así sucede, su autoimagen mejora.

CONSECUENCIAS
1 No esperar significa tener recuerdos con qué batallar.
Una de las bellezas de nuestra mente es su capacidad para recordar. Es así que los recuerdos de experiencias sexuales pasadas vuelven a rondar como «fantasmas sexuales». Decenas de jóvenes me han contado cómo batallan contra el miedo de la «comparación», al relacionar el presente con el funcionamiento sexual de otras parejas. En muchos casos, esta ha destruido la relación. Aun años más tarde, burlándose de la saludable relación o matrimonio, esos fantasmas pueden retornar.
2 El no esperar carcome la autoestima.
La culpa y los remordimientos acompañan generalmente a las relaciones prematrimoniales. Si no se trata debidamente, devastará la autoestima de una persona joven.
3 El no esperar significa la posibilidad de embarazo.
Un embarazo no planeado causa inmenso sufrimiento a la chica, al muchacho, a los padres y al bebé.
4 Hay 34.000 otras razones para esperar.
Ese es el número de nuevas enfermedades por transmisión sexual que se reportan diariamente. Las consecuencias de estas enfermedades incluyen dolor físico, daños cerebrales en los recién nacidos, esterilidad y aun la muerte.

ENSEÑA EL CONTEXTO DE LO POSITIVO
Siempre que Dios emite un mandamiento negativo tal como «¡Espera!», lo hace con dos motivos positivos: protegernos y proveer para nosotros. Él sabe que si el sexo va a ser importante, deberá ser experimentado dentro de cierto contexto. Sus leyes, restricciones y mandamientos establecen los beneficios y es la guía que define amor, relación y matrimonio en su máxima expresión. Es liberador saber que la motivación de Dios para prohibir algunas cosas es para protegernos de influencias destructivas y proveernos de todo lo que necesitamos física, emocional y espiritualmente.
El rey David es un ejemplo de cómo el violar los mandamientos morales de Dios trae dolor al corazón. Después que David cometió adulterio, Dios dijo: «Yo te ungí por rey sobre Israel, y te libré de mano de Saúl, y te di la casa de tu señor, y las mujeres de tu señor en tu seno; además te di la casa de Israel y de Judá; y si esto fuera poco, te habría añadido mucho más» (2 Sa. 12.7, 8).
Sin embargo David «estimó de poco valor» la provisión de Dios y trató de satisfacer sus necesidades a su manera. Esto resultó en muerte, violación, conspiración y disturbio. Pero a través de ello, la misericordia de Dios era evidente. En el Salmo 37.4, 5 David expresó cómo aprendió luego a confiar en un amante Dios que estaba deseoso de proveer y era capaz de hacerlo para todas sus necesidades y protegerlo del mal.
Tanto como sea posible, explícale al adolescente las razones que están detrás de las restricciones que pones sobre él. Comunícale que sólo quieres lo que es mejor para él. No te sorprendas si se enoja contra ti. La mayoría cree que «sabe lo que es mejor» para su vida, pero tú mantente en la postura. Tarde o temprano, el punto principal será entendido: que tú lo amas, y que los límites de tu amor, que provienen de un amante Dios, son para protegerlo y proveer para él.

Se busca: Ministerio Juvenil Eficaz! - Por Lucas Leys.


El ministerio juvenil es un trabajo muy serio, quizás el más serio de todos si se toma en cuenta el tipo de decisiones que tienen que tomar los jóvenes —decisiones que afectarán el resto de su vida—y se considera cuántos de los miembros de nuestras iglesias tomaron sus decisiones espirituales más importantes en la adolescencia.


Alcanzar inteligentemente a la juventud es vital para la iglesia. La mayor parte del liderazgo evangélico coincidirá con esta afirmación. Sin embargo, no muchos saben exactamente cómo hacerlo ni tienen una idea clara acerca de qué es un ministerio juvenil eficaz. Prueba de esto es que históricamente el liderazgo juvenil evangélico latinoamericano se ha desarrollado según el modelo artesanal —el artesano entrena informalmente a un aprendiz sólo mediante el ejemplo. Basta con ver el reducido número de cursos de pastoral juvenil ofrecido por los seminarios y lo limitado del material publicado para líderes juveniles.
Además son pocas las iglesias que sostienen económicamente a sus ministros de jóvenes, y poco el tiempo que la mayoría de los líderes juveniles duran en ese ministerio. Un alto porcentaje cree que el liderazgo juvenil es un escalón para llegar al «ministerio en serio». Tal concepto es un error. El ministerio juvenil es un trabajo muy serio, quizás el más serio de todos si se toma en cuenta el tipo de decisiones que tienen que tomar los jóvenes —decisiones que afectarán el resto de su vida—y se considera cuántos de los miembros de nuestras iglesias tomaron sus decisiones espirituales más importantes en la adolescencia.

Muchas veces es más fácil definir algo por lo que no es que por lo que es. Por eso empiezo nombrando algunos conceptos populares que aunque contienen algo de verdad están equivocados respecto a lo que es un ministerio juvenil eficaz. Hagamos las respectivas aclaraciones:

Lo que el ministerio juvenil eficaz no es:

No es una reunión

Algunos creen que el ministerio juvenil se limita a la reunión del fin de semana. Los que piensan así utilizan todas sus energías en arreglar quién predica, quién dirige la alabanza y quién hace alguna que otra cosa diferente, pero no invierten su tiempo en relacionarse con cada uno de los jóvenes que asisten y menos piensan en todos esos adolescentes del barrio que no quieren por nada del mundo pisar el templo de una iglesia. La materia prima de un ministerio juvenil está compuesta por las personas que componen ese ministerio y las personas que se pretende alcanzar por medio de él. La programación de actividades es una excusa o el medio para acercarse a esas personas, pero hacer una reunión a la semana no es el ministerio de nadie.

No es un convento

Según los objetivos eclesiales que nos dejó el mismo Señor Jesús, la iglesia está para ser agente de transformación en la comunidad. Después de amar a Dios, nuestra segunda consigna clara es amar al prójimo. La iglesia no está para alejar a los jóvenes del «cochino y asqueroso» mundo, sino para entrenarlos y entusiasmarlos con el amor de Cristo de tal manera que puedan contagiar a otros jóvenes con la ética y las verdades del Reino. Los ministerios juveniles estilo «convento» se la pasan hablando de lo malo que es el mundo sin dar ninguna alternativa, o peor, sin siquiera hacer contacto con nada de lo que los jóvenes viven en la vida diaria fuera de los templos. Estos ministerios suelen utilizar la Biblia como un texto del pasado sin hacer puentes con el presente. Crean una de dos situaciones: o jóvenes «extraterrestres» que no saben relacionarse con sus compañeros de escuela o barrio que necesitan a Jesucristo, o jóvenes hipócritas que viven una cosa en el templo pero fuera de él piensan y hacen otra.

No es un frigorífico

El propósito del ministerio juvenil no es mantener entretenidos a los jóvenes con actividades sanas mientras lleguen a la adultez. Las iglesias que piensan de esta manera suelen creer que los jóvenes y adolescentes no pueden servir al Señor durante esa edad y que la tarea con ellos consiste sólo en mantenerlos aprendiendo y en librarlos del mal mientras se hagan adultos.

El no tomar en cuenta a los adolescentes es señal de una iglesia local minusválida. El apóstol fue claro al afirmar en 1 Co 12.4–11 que todos los nacidos de nuevo poseen dones, y los adolescentes no son la excepción. Es increíble el potencial que los adolescentes representan para el hoy de cada congregación. En general, ellos tienen más tiempo, más energía y más facilidad para alcanzar a otras familias a través de sus compañeros de estudio. Ellos tienen todas las posibilidades de convertirse en los miembros más activos de cada congregación, y el ministerio juvenil debería ser una punta de lanza para la estrategia evangelizadora de cada iglesia local.
No es una escuela

Gracias a los griegos, en occidente se cree que el sistema de enseñanza es como llenar un vaso de agua. Es desde la antigüedad que se cree que si se tiene la información correcta se funciona correctamente. Pero este concepto es impreciso. Muchos conocemos gente que tiene toda la información bíblica necesaria, y sin embargo, no posee nada del fruto del Espíritu Santo. Los jóvenes no son como un vaso de agua que se llena sino como un fuego que se enciende. Nuestra función no es meramente enseñarles las historias bíblicas y obligarlos a aprender versículos bíblicos. La enseñanza es un componente muy valioso pero hay diversas maneras de propiciar el aprendizaje y sobre todo la madurez de nuestros jóvenes. Si al pensar en el ministerio juvenil la única imagen que viene a la mente de un líder es la de un grupo de jóvenes sentados mirándose la nuca y escuchándolo a él disertar por más de una hora, ese líder está en serios problemas y difícilmente podrá alcanzar lo que Cristo espera de nuestro ministerio.
Lo que un ministerio juvenil eficaz sí es

Trabaja basándose en un propósito definido
Lo primero que hay que definir es el propósito ¿Para qué existe y qué se supone que debe lograr un ministerio juvenil? Pablo hace un excelente resumen del propósito de su ministerio en Colosenses 1.28 «A este Cristo proclamamos, aconsejando y enseñando con toda sabiduría a todos los seres humanos para presentarlos a todos perfectos en él.» O sea que todo lo que Pablo hacía y decía por Cristo era con el objetivo definido de poder acompañar a cada ser humano a un grado mayor de perfección. Esta última palabra siempre me pareció extraña, pero al investigarla me resultó muy clarificador encontrar que en el texto griego la palabra traducida como «perfectos» es teleios que también se puede traducir como «maduros». El propósito del ministerio juvenil es acompañar a la juventud hacia la madurez completa la cual sólo se puede encontrar en Cristo.

Acompaña a los adolescentes en los cinco factores de su desarrollo

La adolescencia es la etapa de transición que va desde la niñez a la adultez. Esta carrera se hace sobre cinco andariveles o carriles que son el físico, emocional, intelectual, social y espiritual. Por cada uno de ellos los jovencitos van tratando de satisfacer sus necesidades esenciales de identidad e independencia en el camino hacia la madurez. Nuestra tarea es facilitarles los recursos necesarios y no dejarlos solos en el proceso.

El ministerio juvenil eficaz presta mucha atención a cada uno de estos andariveles y planea activamente cómo acompañar a los adolescentes en su camino hacia la madurez. Incluye deportes porque estos favorecen el factor físico. Estimula el pensamiento crítico con debates, cuestionarios, y dando libertad para preguntas, porque es necesario para su desarrollo intelectual. Facilita relaciones positivas entre adolescentes homogéneos y heterogéneos para que aprendan a ser individuos que puedan funcionar bien en la sociedad. El liderazgo eficaz ofrece seguridad para los diferentes picos de la montaña rusa de emociones que los adolescentes viven y, sobre todo, modela la madurez espiritual.

Trabaja basándose en relaciones

Un ministerio juvenil eficaz no tiene nada que ver con tamaño, ni horarios, ni reuniones «lindas». Hay ministerios juveniles sanos de todos los tamaños y con todos los estilos así como también los hay enfermos. En los ministerios juveniles sanos la gran clave es la relación de los líderes con los jóvenes y el trabajo cuidadoso, paciente y dedicado para que estos se relacionen cada día más y mejor con Cristo.
Ideas para desarrollar relaciones que produzcan madurez
Propongo algunas ideas para trabajar seriamente esas relaciones. Las siguientes son algunas habilidades de los líderes juveniles más eficaces:



Tener orejas activas:
Somos tan propensos a hablar que nos cuesta demasiado escuchar. Este es uno de los errores más marcados en muchos líderes cristianos. Algunos, aun cuando se encuentran en situaciones en que pueden dar un consejo, no escuchan lo que se les dice porque, mientras la otra persona habla, ellos ya están pensando qué decir después. La que sigue es una frase dura: «Si no podemos escuchar a alguien en necesidad a quien vemos, ¿cómo vamos a escuchar a Dios a quien no vemos?» La mayoría de los adolescentes necesita de alguien que los escuche. El simple hecho de escucharlos es una herramienta muy poderosa para impactarlos sin hablar. Escuchar activamente no se limita sólo a prestar oído a las palabras. También es necesario estar atentos al lenguaje corporal pues muchas personas siempre comunican algo sin necesidad de verbalizarlo. Hacer preguntas abiertas o remarcar emociones con frases de empatía como «eso sí debe haber sido terrible» siempre ayuda.

Recordar nombres:
El nombre es una de las posesiones más importantes de una persona. El no saber el nombre de un joven comunica que ese joven no es lo suficientemente importante para el líder. Por eso, si queremos que nuestros jóvenes sientan que son importantes para nosotros debemos hacer todo lo posible por tener bien presente su nombre. ¿Por qué alguien de quien no recordamos ni el nombre va a querer seguir nuestros consejos? Todavía me parece increíble la cantidad de iglesias dónde la gente se esconde detrás del «hermano/hermana» porque nunca se aprenden el nombre de los demás. Yo no conozco ninguna familia en la cual se traten entre sí de «hermano/hermana» en lugar del nombre. El nombre de uno es muy importante. Quiero compartir algunas claves para recordar nombres:
1 Repita el nombre tan pronto como pueda después de que le presenten al nuevo joven.
2 Una vez que ha aprendido un nombre úselo frecuentemente en cada conversación.
3 Use el nombre antes de hacer una pregunta.
4 Relacione el nombre con el de alguien a quien ya conoce.
5 Cuando repita el nombre que está aprendiendo reproduzca mentalmente la imagen de la cara de la persona.
6 Escriba el nombre en su mano o en un papel cuando le presenten a alguien antes de que empiece una reunión y después menciónelo durante la misma.
7 Pídale ayuda a Dios para recordar esto que es tan importante.

Estimular con aplausos, porras, palmadas:
Nunca recibimos suficiente estímulo. Todos estamos siempre sedientos de más, y no me da ninguna vergüenza decirlo: me encanta que alguien se dé cuenta cuando he hecho algún esfuerzo. ¿A usted no? A nuestros jóvenes también. La sociedad de hoy está siempre rebajando a nuestros adolescentes. Los medios masivos de comunicación les hacen creer que ellos no son ni tienen lo suficiente hasta que se compren determinado producto o usen determinada moda. Sus compañeros de escuela usan la burla a la primera oportunidad y muchas veces sus padres se encargan de hacerlos sentir mal respecto de sí mismos. Alguien que los haga sentir mejor consigo mismos —que les muestre aprecio y estima— es siempre bienvenido. Hay algunos valores, actitudes y aptitudes que deben constantemente ser aplaudidos y afirmados en nuestros jóvenes. Ofrezco una lista de aquellos que no deben pasar desapercibidos y quedar sin estímulo del líder:
• sentido del humor
• fidelidad
• puntualidad
• esfuerzo extra
• voz fuerte
• sonrisa
• nuevo peinado
• modales
• disponibilidad
• disposición
• flexibilidad
• conocimiento general
• conocimiento bíblico
• humildad
• honestidad
• habilidad para algún deporte
• habilidad de hacer que otros se sientan mejor
• iniciativa de acercarse a alguien nuevo
• defender a quien recibe burlas
• buen rendimiento académico

Usted puede añadir su propia lista

Mantener el contacto: teléfono/correo/e-mail:
Cualquier excusa es buena para hacer contacto con los jóvenes fuera del ámbito del templo. Si quiere trabajar en la vida de ellos tiene que hacer contacto en lo cotidiano de su vida. Conéctese con el joven cuando piense en él sin causa aparente. Comuníquese con él cuando tiene cierto tiempo de no verlo. Llámelo cuando haya visto algo sobresaliente en él, ya sea para agradecerle, afirmarlo o animarlo. Búsquelo para continuar alguna conversación.

Preparar frases inteligentes:
Existen algunas frases que deben ser repetidas constantemente a los jóvenes. Notará que algunas se han formulado como preguntas.
• Tú puedes hacerlo muy bien.
• No te rindas.
• ¡Qué buena idea!
• ¿Qué crees que Dios te está enseñando?
• Dime más acerca de eso.
• Gracias por escuchar.
• Gracias por ayudar.
• ¿Quieres venir conmigo?
• ¿Cuáles son las consecuencias potenciales?
• ¿Qué es lo que te gusta de él/ella?
• Estoy seguro de que harás una buena elección.
• ¡Qué lindo verte!
• ¿Qué piensan tus padres?
• Me gusta tenerte en la iglesia.
• Recuérdame tu nombre.



El ministerio juvenil es la preciosa aventura de acompañar a los adolescentes y jóvenes hacia la madurez en Cristo por todos los medios que podamos. Es un ministerio difícil y que demanda sacrificios. Lo resultados son siempre a largo plazo y muchos de ellos no alcanzan a verse porque nuestro trabajo consiste más en prevenir que en curar. Los líderes juveniles están forjando a los portadores de la única esperanza para las familias de la tierra. Están dando forma a la iglesia de Cristo del hoy y del futuro.



El autor es Doctor en Teología de la Misión y es director de Especialidades Juveniles, una organización que genera recursos para el ministerio juvenil. También ha escrito libros, entre ellos Adolescentes, cómo trabajar con ellos , Viene D@vid, y 151 Encuentros con el Rey.

Ideas básicas de este artículo
1 La tarea más importante de los ministerios juveniles eficaces es formar relaciones entre el líder y cada joven a fin de acompañarlo en su proceso hacia la madurez completa la cual sólo se puede encontrar en Cristo.
2 El líder de un ministerio juvenil debe desarrollar ciertas habilidades para edificar relaciones que produzcan madurez.

Preguntas para pensar y dialogar
1 En su iglesia, ¿a qué tareas se da mayor énfasis o esfuerzo en el ministerio juvenil? ¿Es la edificación de relaciones una tarea fundamental?
2 ¿Por qué cree usted que el edificar relaciones es tan fundamental en el liderazgo juveni
3 Si en su ministerio para jóvenes no se está trabajando en edificar relaciones, ¿qué acciones concretas deberían darse para que el ministerio se enfoque en relaciones?